Hoy os queremos contar una historia real y reciente que nos ha ocurrido con un cliente y que demuestra, una vez más, la importancia que tiene trabajar con una agencia inmobiliaria durante la venta de un inmueble y, sobre todo que el trabajo desempeñado, sin duda, justifica totalmente los honorarios de intermediación. ¡Veamos porqué!
Resulta que un propietario de un piso en Mahón, estaba interesado en poner su propiedad a la venta. Con el objetivo de obtener un mayor beneficio sobre la venta, y siendo consciente de que su propiedad era lo suficientemente atractiva para generar interés sobre ella, intentó llevar a cabo la venta, por cuenta propia y sin intermediación; gestionando todo el proceso de venta él mismo. Ello incluía: preparar todos los documentos necesarios para poner el piso a la venta, publicar el inmueble en los diferentes portales inmobiliarios (cuidando la descripción, realizando imágenes profesionales, videos, tour 360º); y, sobre todo, gestionar todas las consultas informativas y realizar todas y cada una de las visitas de potenciales compradores al inmueble. El propietario se informó y consultó una guía informativa sobre consejos para vender una casa y se puso manos a la obra siguiendo paso a paso cada una de las fases y acciones de venta.Resulta que, un joven, propietario de un piso en Mahón, estaba interesado en poner su propiedad a la venta. Con el objetivo de ahorrarse los honorarios de intermediación inmobiliaria, lo intentó, primero, por su cuenta; sin ayuda externa y gestionando todo el proceso de venta él mismo. Ello incluía: preparar todos los documentos necesarios para poner el piso a la venta, publicar el inmueble en los diferentes portales inmobiliarios (cuidando la descripción, las imágenes, videos, tour 360º (que primero tuvo que realizar y posteriormente editar); pero, sobre todo, gestionar todas las peticiones, consultas informativas y visitas de potenciales compradores al inmueble.
Situación: «Un propietario desea poner un inmueble a la venta en Mahón, y pensando que la propiedad es lo suficientemente atractiva y se encuentra a precio de mercado podrá conseguir venderlo por su cuenta, y de forma rápida y sin preocupaciones».
Este propietario, pensando que tenía una propiedad atractiva, cuidada y con buena presentación, a un precio acertado para el mercado, etc. se sorprendió de que 4 meses después todavía no había conseguido venderla y es más, había invertido mucho más tiempo, esfuerzo y presupuesto del que inicialmente había considerado. Estaba empezando a considerar la opción de acudir a una agencia inmobiliaria para llevar a cabo esta operación.
Problemática: «El propietario lleva 4 meses dedicando tiempo, dinero y esfuerzo, a la venta del inmueble y por un motivo u otro todavía no ha conseguido cerrar su venta; y lo que es peor, parece que todavía está lejos de hacerlo».
Varias veces este propietario tuvo la sensación de haber encontrado al comprador ideal y en todas estas situaciones, la operación se acabó truncando por un motivo u otro (falta de financiación final, pendientes de otras operaciones previas para llevar a cabo la compra, etc.). Hasta aquí había llegado su paciencia (y su tiempo también). Decidió finalmente acudir a una agencia inmobiliaria a pesar de tener que pagar la comisión u honorarios de agencia.
Como decíamos, el propietario se puso en contacto con una agencia del grupo Portal Menorca, concretamente con Fincas Mantolan, para que fueran ellos los que se hicieran cargo y gestionaran la venta del inmueble. ¿El resultado final? El inmueble se acabó vendiendo tras 2 semanas.
Era totalmente cierto que el producto era atractivo pero, por un lado existía una discrepancia entre el precio de venta y el valor de mercado ; y, segundo, hacia falta una mejor gestión, más eficiente de las peticiones de información y solicitudes de visitas. Gracias a la experiencia de los agentes inmobiliarios, se comenzaron a priorizar las oportunidades recibidas en función de la calidad de las mismas («lead scoring») y esto fue, entre otras cosas, lo que marcó la diferencia en el proceso.
Conclusión: «Aunque a priori parece que el valor que aporta una agencia inmobiliaria no justifica los honorarios de la misma, te sorprenderías todo el trabajo, experiencia y conocimiento que te aportan y la liberación en cuanto a estrés y dolores de cabeza que una venta inmobiliaria puede acarrear».
¿Cual es la conclusión final a la que llegó el propietario? Aunque a priori, no veía o entendía por qué trabajar con una agencia inmobiliaria para vender su inmueble, finalmente se convenció de que la experiencia y conocimiento que le aportaba la agencia fueron claves en conseguir una venta rápida, a un precio acordado de acuerdo al valor de mercado y, más importante aún, sin dolores de cabeza.
Según el propietario: «si hubiera sabido todo el tiempo, dinero y esfuerzo que puse en la venta durante los primeros 4 meses, sin obtener resultado alguno más que dolores de cabeza, hubiera acudido antes a una agencia inmobiliaria especializada».